martes, 10 de febrero de 2015

Erase una vez: Un principe y una princesa

¡Hola a todos!

Faltan exactamente cinco días para San Valentin y siento decirte que si buscas una lista de diez signos de amor, test Facebook para tu media naranja o que regalar a tu pareja estás en el blog equivocado...

En realidad no soy quien para dar consejos sobre esos menesteres, pero siempre he querido escribir una sección sobre las personas anónimas más increibles que he conocido a lo largo de mi vida... y no hay mejor forma de empezar que hablando de una historia de amor de verdad, de esas que incluso a los chicos nos gusta escuchar aunque no lo admitamos nunca.

La ciudad donde se desarrolla la historia: Adelaide


Nuestros protagonistas
Ella era una princesa de Madrid, pero sin titulo nobiliario. Recalco que era una princesa porque tenía su propio pequeño mundo a los pies, aunque nunca lo reconozca abiertamente.

Con una más que probable exitosa carrera profesional por delante como dentista, nuestra protagonista vivía en la zona más exclusiva de la capital, conocía los mejores restaurantes de la ciudad, a la gente más trending... pero aún más importante, estaba rodeada de una familia unida y unos amigos de los de siempre y para siempre.

Él era un principe australiano, miembro de la nobleza mas tradicional del vino. Todo estaba perfectamente trazado en su vida para ser feliz. Formado como enólogo en las mejores universidades de Europa, antes de conocer a nuestra princesa ya era portada de anuncios y calendarios para los paladares mas exquisitos del mundo. El buque insignia y orgullo de una marca con mas de ciento cincuenta años de historia, tantos como pretendientas esperaban su vuelta a casa.

Si empezamos por el final, el deselance ocurrió hace menos de un año con él de rodillas en la Bahia de Sidney y ella diciendo si quiero, aunque sea el resto de la historia lo realmente importante.
Es la parte que no lo vereis en las películas este San Valentín porque no es necesariamente bonito ni agradable, pero merece ser contado.

La escena del crimen

La princesa acabo dejando su reino y su vida profesional aparcados por él.
Cambio sus fiestas VIP por pupitre, sus Master de dentista por clases de inglés con una farmaceutica  gallega, sus desayunos en Serrano por mandar curriculums durante meses esperando una oportunidad. Sus amigos y familia dejaron paso a gente totalmente ajena y distinta a ella.


El principe ya no es el ejemplo tradicional que los australianos imaginaban. Ahora viste Europeo y hasta habla español. Aún se despierta cada dia a las cinco de la mañana para llegar a los vinedos desde el centro de la ciudad, y paga alquiler porque su vida y hogar trazados no estan ya en Barossa Valley. A pesar de lo que piense el resto de su antiguo mundo, se niega a darse por vencido sin ella...

Un koala aunque no venga a cuento, porque siempre queda bien
Hace tiempo que las doce uvas y no las barbacoas son parte de su 31 de enero. Las ojeras no duran solo Año Nuevo y cada tarde, cada dia, busca nuevas maneras de hacerla feliz.


Aunque no se den cuenta, ella sigue rompiendo cuellos con su moda española por Rundle Mall cuando va a comprar flores para su nuevo hogar. El sigue poniendo nervioso a todas las camareras que aun le reconocen cuando van a cenar juntos.


El principe y la princesa me han demostrado que el amor es algo real y capaz de cambiar tu vida totalmente. No hay retorno al punto de partida, ni engaños, ni atajos. En el amor no hay planes, ni balanzas. No son matemáticas, no siempre suma, a veces resta y desgasta. Sin embargo, al menos para nuestros protragonistas, es algo tan facil como intentar ser feliz con quien realmente quieres, sin importar los problemas ni las dificultades añadidas.


Al final si hubo final feliz y mesa para dos

Feliz San Valentin a todos desde la isla Canguro, especialmente a mi principe y princesa favoritos.






"How many times do I have to tell you
Even when you're crying you're beautiful too
The world is beating you down, I'm around through every mood
You're my downfall, you're my muse
My worst distraction, my rhythm and blues
I can't stop singing, it's ringing, in my head for you"



domingo, 8 de febrero de 2015

El símbolo de la ciudad de Adelaide

¿Qué hago escribiendo más de un año después?

El Arcade Tunnel Construido en 1885 suele estar en la lista
     La verdad es que estoy a un mes de empezar mi último semestre en la Universidad de Adelaide y mi vida está a punto de dar un giro de 180º grados una vez más. Entre tantas preocupaciones esta semana redescubrí la mejor parte de mi nueva ciudad, algo que ninguno os podeis perder cuando me vengáis a ver a South Australia. No son los vinos de Barossa Valley, ni el nuevo Oval, ni nada que puedas encontrar en una guía turística... el verdadero símbolo de Adelaide está abierto al público todos los días durante algo más de media hora y lo mejor de todo es que es totalmente gratis.



 Lo único que necesitas para visitarlo es un coche o subirte a un tranvía, llegar a una de las muchas playas cercanas, sentarte en la arena y esperar a que anochezca. 

He tenido la suerte de ver el Burj Dubai en los Emiratos, pero el cielo de Adelaide no solo es más alto que cualquier construcción, inspira tanto como la Estatua de la Libertad de Nueva York y el sonido del mar de fondo no envidia al acústico de la Opera de Sidney.



   



Los anocheceres de Adelaide son el secreto mejor guardado de South Australia... congregan tantas parejas como la Torre Eiffel y estoy seguro de que han inspirado a tantos artistas y músicos a lo largo de la historia como el museo del Prado de Madrid.




Cada noche, la gente se sienta y deja espacio como si volviesen a tocar en la ciudad los Rolling Stones.
Es algo tan especial que durante ese tiempo fotógrafos profesionales, parejas rubias australianas, decenas de exiliados de Afganistan, refugiados de Africa, estudiantes becados e incluso hasta una familia gallega comparten un trozo de playa y olvidan sus problemas.




A primera vista solo veras abrazos y sonrisas, pero la ultima vez que visite Glenelg me fije mejor y descubrí a un hombre indio solo que parecía sacarse una selfie justo debajo del Jetti. Al pasar por su lado me di cuenta de que estaba haciendo Skype con su familia.

Esto no es una entrada sobre amaneceres bonitos, Adelaide es mucho mas que eso, es tranquilidad, ilusión y esperanza por un futuro feliz con quien realmente quieres, mas allá de los problemas y las dificultades. Lo verdaderamente importante es ver como durante ese tiempo la gente de todo el mundo que vive en esta ciudad se olvida de la morriña, de las noticias de odio y guerras, de la corrupción y del sufrimiento. Todos miramos al mar para inspirarnos, exactamente igual a cuando Rosalia de Castro escuchó las olas rompiendo en Galicia y Otis Redding compuso "Sitting on the dock of the Bay".


Feliz anochecer Australia, feliz amanecer Galicia.







"So, I'm just gon' sit on the dock of the bay
Watchin' the tide roll away, ooh
I'm sittin' on the dock of the bay
Wastin' time"

viernes, 3 de enero de 2014

Mi primer mensaje de 2014, sobre pilares y estructuras.

Me gusta leer aunque nunca seré un erudito, me encanta la música y no se interpretar una sola partitura... La clave está en valorar como en cada nota, en cada página de cada libro e incluso en cada letra que publicamos en internet alguien hace un esfuerzo por transmitir un mensaje.

Tendemos a infravalorar su impacto, a veces no vemos que el poder de nuestras palabras va mucho más allá de un retweet o un like en Facebook.  Este 2014 tengo un solo proposito, no puedo crear partituras, no escribiré una novela, ni seré el mejor blogger del mundo pero voy a intentar cuidar lo que transmito para que aporte a quien me lea.


Dicho esto, toca hacer mi análisis de 2013. Por suerte para vosotros os ahorro un flipagram con mi cara a doscientos kilómetros por hora.
Me he mudado desde el norte de España a Australia a principios de enero y he tenido que rehacer mi biografia en 365 dias.

En poco menos de un mes pasé de aprender en pizarra de gravilla, con 30 amigos, a clases en otra idioma impartidas en aulas magnas con desconocidos de más de 80 paises distintos.  2013 ha echo mi vida mucho más solida, ha tirado abajo la antigua estructura, con todos sus miedos y complejos.


Descubrí que mi generación, mi pais más alla de sus políticos y su sistema financiero, tiene mucho que ofrecer. Todos aportamos, todos tenemos algo valioso que transmitir y todos deberiamos tener la oportunidad de compartir nuestro talento, más de alla de colores de piel, estigmas o banderas. No hagas caso del pesimismo que te rodea, el mundo entero nos necesita para buscar la luz del futuro.



 




Adelaide fue un vendaval que también dejo al descubierto las cinco bases que sujetan mi estructura.



Las dos primeras aún siguen en Galicia.  Después de tantos consejos, de tantos cortes de pelo, de tantos zumos, tantas horas cuidandome, después incluso de coger un avión y lanzarse para pasar la Navidad conmigo en Chicago se han reinventado y se han enganchado al "guasap", solo para poder ver como les va a sus nietos en Australia.

Las otras tres bases me las traje conmigo el avión. El primero es como un pilar de hormigón. Da igual lo que le lanzes, no importa el idioma o los problemas que pueda tener siendo un adolescente a 20,000km de casa porque su cabeza nunca deja de pensar en los demás. Mi mejor amigo tiene 15 años, porque no cambio ningún plan por dar toques con mi hermano en la playa.


También tengo un diamante. Es el padre más valioso del mundo y no exagero. Jamás se ralla, da igual la presión que tenga que soportar, se lleva por delante los problemas, la crisis, los recortes, el idioma y su propio placer por darme oportunidades...  Lo hace a base de tener un don y saber combinarlo con sacrificios, con trabajo y con ejemplo de lo que es ser una buena persona.



       El último pilar está aún más profundo que el resto, es la base. Imagínate que has luchado, que has trabajo y te has formado, imaginate que después de horas estudiando embarazada, después de criar a dos hijos y  después deguardias en verano para vivir donde siempre has querido tienes que sacrificarlo todo por los demás.

Se ha escrito mucho sobre madres, pero nada se compara a la mia ganando 365 batallas que ni siquiera eran suyas. Este año la vi aprendiendo inglés desde cero para explicarle a mi hermano quimica, y conduciendo por la izquierda solo para recogerme de la biblioteca y que estuviese tranquilo en examenes finales. Ella, la farmaceutica ha madrugando el doble que nadie para dejarnos la comida hecha y llegar a sus nuevas clases, es la mayor motivación que tengo para ser mejor cada dia.



Aprendí que el 25 de diciembre puede seguir siendo mágico lejos de casa, si hay skype y mesa de cuatro con quién realmente quieres. Lo demás es solo el papel de regalo.






"para soñar hay que empezar de 0,

la suerte ayuda a los que quieren volar
más allá del mar, más allá del miedo"

Feliz 2014 desde la Isla Canguro.

sábado, 26 de octubre de 2013

Esperando el autobús

Anocher desde Henley Beach!
      Siempre he estado en la luna. No es una cuestión de despiste, desde pequeño he vivido como los ejecutivos que ves en un aeropuerto o las miradas vacías que se cruzan en la estación.  
Hablando de estaciones, a los 13 años dejé de esperar el Andén 9 y 3/4, me perdí en la Ciudad de la Alegría de Dominique Lapierre y entre las aventuras de Julio Verne... Con frecuencia cambiaba el destino de mi viaje, pero no me importaba, siempre tuve claro que la experiencia merecería la pena.

En pocos años mi vida ha cambiado mucho, Estados Unidos, Africa, Australia...
He empezado el viaje y muchos de los sueños que acumulaba entre las páginas de mi biblioteca se han convertido en realidad.

Hoy estaba tumbado en la cama y entre las mil canciones de mi lista se coló una de Sabina, de esas que mi madre ponía en el coche cuando aun vivíamos en Ferrol... supongo que la vida siempre te da lecciones. 

Apunta alto y no dudes en arriesgarte por lo que quieres, pero nunca olvides que el viaje comienza antes de ponerte en marcha y que el mundo gira aunque tu no te muevas. Si tienes los ojos abiertos, las mejores historias pueden empezar cuando aún estás esperando a que llegue el autobús. 




"Porque una casa sin ti es una oficina 
Un teléfono ardiendo en la cabina 
Una palmera en el museo de cera 
Un exódo de oscuras golondrinas"

Bienvenid@ a mi nuevo blog, un abrazo desde la Isla Canguro!! :)